domingo, 19 de mayo de 2013

MAYA – Una terrible realidad ilusoria-

MAYA Una terrible realidad ilusoria-
LA ilusión a la cual estamos supeditados en este plano material, es llamada MAYA, es un velo invisible capaz de bloquear absolutamente todo lo que podría ser real mientras que nos proyecta una diferentísima visión ya sea hermosa o terrorífica, eso si, irreal.
Lo incomodo de la situación, es que no nos damos cuenta cuando estamos atrapados en maya, sino hasta cuando salimos de ella. Cuando el denso velo es retirado mágicamente de nuestros ojos, es cuando no podemos creer lo envueltos que estábamos en la ilusión. Salir de maya es llegar a la claridad, entender, ver, realizar.
Estando en la claridad, de manera casi imperceptible, poco a poco el velo nos empieza a cubrir de nuevo y nosotros, felices y de manera inconsciente nos volvemos a sumergir íntegramente en el mar de ilusión.
¿Cómo retirar el velo, si cuando nos cubre, no nos damos cuenta?
Lo primero que debemos tener en cuenta, es lo valientes que debemos ser para querer que el velo sea retirado y que como consecuencia se manifieste ante nosotros esa realidad que aunque nos rodeaba pasaba desapercibida, por lo menos para nosotros mismos.
No es fácil llegar a ver o entender lo que somos, lo que hacemos, lo que pensamos y deseamos, pues, a pesar de haberlo estado haciendo por años, somos tristemente los últimos en darnos cuenta de ello.
Para nuestro entorno es obvio que ciertas conductas sean parte de nosotros, pero para nosotros es algo imposible, lejano, impensable, por eso cuando lo vemos en otros molesta, duele, genera ansiedad o tensión.
Se requiere de valentía para salir de la comodidad de maya y adentrarse en una maraña de pensamientos y conductas incongruentes que esperan que les prestemos atención, esperan que saquemos parte de nuestro valioso tiempo para entender, identificar, aceptar, perdonar y trascender. Esto no es tarea fácil, pero es parte de la evolución. Recordemos que para evolucionar debemos realizar a través de la experiencia y del trabajo personal y que además se requiere de voluntad y esfuerzo para salirse de la ignorancia en que cómodamente maya nos abrazaba.
 
En segundo lugar, debemos ser responsables con la información que recibimos, debemos hacer algo al respecto, y para lograrlo necesitamos firmeza.

Se logra trascender, cuando esa realización tiene un impacto en nuestra vida, puesto que cuando alguna conducta, pensamiento o comportamiento, cambia, dando lugar al bienestar, a la paz interior significa que hemos trascendido, estamos evolucionando y esa es la intención.

Para retirar el velo, simplemente observa tu reacción ante las conductas de los demás, observa lo que más te irrita que hagan los demás, pues bien, ahí lo tienes, ese es tu comportamiento reiterativo y secreto para ti y evidente para los demás.

El otro se convierte en un espejo, otros pueden tener comportamientos que te molesten levemente, pero hay uno de esos que realmente te saca de quicio, te perturba la paz interior, ese es el reflejo de ti en el otro. Y lo que más te molesta del otro de manera inconsciente te molesta por que tú también actúas así o hablas así o reaccionas así y no te gusta ver la realidad
Shakti-.

 

 

 
 
 
 







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Yoga/Meditación/Coaching del Ser/Reiki/Terapia Psicológica

domingo, 19 de mayo de 2013

MAYA – Una terrible realidad ilusoria-

MAYA Una terrible realidad ilusoria-
LA ilusión a la cual estamos supeditados en este plano material, es llamada MAYA, es un velo invisible capaz de bloquear absolutamente todo lo que podría ser real mientras que nos proyecta una diferentísima visión ya sea hermosa o terrorífica, eso si, irreal.
Lo incomodo de la situación, es que no nos damos cuenta cuando estamos atrapados en maya, sino hasta cuando salimos de ella. Cuando el denso velo es retirado mágicamente de nuestros ojos, es cuando no podemos creer lo envueltos que estábamos en la ilusión. Salir de maya es llegar a la claridad, entender, ver, realizar.
Estando en la claridad, de manera casi imperceptible, poco a poco el velo nos empieza a cubrir de nuevo y nosotros, felices y de manera inconsciente nos volvemos a sumergir íntegramente en el mar de ilusión.
¿Cómo retirar el velo, si cuando nos cubre, no nos damos cuenta?
Lo primero que debemos tener en cuenta, es lo valientes que debemos ser para querer que el velo sea retirado y que como consecuencia se manifieste ante nosotros esa realidad que aunque nos rodeaba pasaba desapercibida, por lo menos para nosotros mismos.
No es fácil llegar a ver o entender lo que somos, lo que hacemos, lo que pensamos y deseamos, pues, a pesar de haberlo estado haciendo por años, somos tristemente los últimos en darnos cuenta de ello.
Para nuestro entorno es obvio que ciertas conductas sean parte de nosotros, pero para nosotros es algo imposible, lejano, impensable, por eso cuando lo vemos en otros molesta, duele, genera ansiedad o tensión.
Se requiere de valentía para salir de la comodidad de maya y adentrarse en una maraña de pensamientos y conductas incongruentes que esperan que les prestemos atención, esperan que saquemos parte de nuestro valioso tiempo para entender, identificar, aceptar, perdonar y trascender. Esto no es tarea fácil, pero es parte de la evolución. Recordemos que para evolucionar debemos realizar a través de la experiencia y del trabajo personal y que además se requiere de voluntad y esfuerzo para salirse de la ignorancia en que cómodamente maya nos abrazaba.
 
En segundo lugar, debemos ser responsables con la información que recibimos, debemos hacer algo al respecto, y para lograrlo necesitamos firmeza.

Se logra trascender, cuando esa realización tiene un impacto en nuestra vida, puesto que cuando alguna conducta, pensamiento o comportamiento, cambia, dando lugar al bienestar, a la paz interior significa que hemos trascendido, estamos evolucionando y esa es la intención.

Para retirar el velo, simplemente observa tu reacción ante las conductas de los demás, observa lo que más te irrita que hagan los demás, pues bien, ahí lo tienes, ese es tu comportamiento reiterativo y secreto para ti y evidente para los demás.

El otro se convierte en un espejo, otros pueden tener comportamientos que te molesten levemente, pero hay uno de esos que realmente te saca de quicio, te perturba la paz interior, ese es el reflejo de ti en el otro. Y lo que más te molesta del otro de manera inconsciente te molesta por que tú también actúas así o hablas así o reaccionas así y no te gusta ver la realidad
Shakti-.

 

 

 
 
 
 







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