LA MENTE
La mente es un arroyo que permanece
en continuo movimiento. Lo ideal es que éste sea cristalino, pero cuando los
pensamientos aumentan y la respiración disminuye, la mente se vuelve turbia,
densa, como si numerosos caballos atravesaran el arroyo con sus pesadas patas y
fuertes cascos, levantando el fango y tornando el agua oscura, revuelta. Se
dificulta mirar a través de ella, saber que hay más allá. Entre más movimiento
tenga la mente –léase pensamiento– más turbia se vuelve.
Si permitimos al agua calmarse, aquietarse,
esta nuevamente se tornará clara, cristalina. Así de sencillo.
Para empezar a poner en práctica lo
anterior, te invito a llevar a cabo una prueba, luego tú decides si sirve o no.
Simplemente se trata de experimentar… Toma cinco minutos para ti, pretendemos
encontrar o recuperar la tranquilidad a través de los ejercicios de respiración,
es decir vamos a hacer pranayamas.
1.
Busca un lugar adecuado, tranquilo donde estés sol@ y
puedes sentarte o acostarte. Si elegiste la primera opción, pon tu espalda
recta, hombros atrás y abajo, cabeza ligeramente inclinada hacia adelante, para
permitir que la espina dorsal se alargue aún más; si elegiste la segunda
opción, procura acostarte sobre algo firme y no usar almohada. Puedes usar música
relajante, aromas como incienso, velas. Organiza el espacio apropiado para ti, en
el que te sientas comod@.
2.
Cierra los ojos y la boca, respira lenta y profundamente
por la nariz, no hay ninguna prisa, no hay ningún afán. Una vez hayas inhalado
cuanto sea posible, retines el aire varios segundos, también lo que más puedas,
luego exhalas despacio, calmadamente por la nariz. Una vez hayas exhalado
totalmente, te quedas unos segundos sin aire, sin inhalar. Ese es un ciclo de
respiración, que consta de cuatro tiempos, inhalar – retener – exhalar – retener.
Cuando termines el primer ciclo, inicias otro ciclo completo de respiración.
3.
Cuenta cuantos segundos te demoras en cada inhalación,
retención y exhalación. En el siguiente ciclo, procura aumentar esos tiempos, que
se alarguen más.
4.
SI logras hacer tres ciclos ininterrumpidos, TE FELICITO!!!
Haz traído a tu SER, oxigeno, vida, claridad mental, sabiduría, paz y
tranquilidad.
NAMASTE, Shakti.